David Vostell | 2003



 The Being from Earth | 1990




Blue way in | 1986




  
  








The Being from Earth | Das Wesen der Erde | El Ser de la Tierra | 1990














Lost in Life | 1985



                 no one to guide me through and day and night without a clue




Ginger Hel | 1982










Words on paper | Worte auf Papier | Palabras sobre papel | 1984






My mind | 2012 | digital photomontages | digitale Fotocollagen | collages fotográficos digitales








  

Sketch Book 1995 - 1998 | 1998




Isabel Dominguez & David Vostell | Madrid 2010 



                      
             
                                    



                        The Being from Earth | 1990

           









The Being from Earth | Olaf Bessenbacher | David Vostell | The Being from Earth | 1990 | shooting | Dreharbeiten in Mojave Dessert


David Vostell | Biografía / Recopilación 1978 - 2008 |  Michaela Nolte | 2008

In mehr als drei Jahrzehnten ist bei David Vostell ein Werk entstanden, das in seiner Gesamtheit noch entdeckt werden muss. Wir freuen uns, mit der Biographie von Michaela Nolte, einen Teil dazu beizutragen. Über 1000 Abbildungen und ein essayistisches Portrait geben zum ersten Mal einen retrospektiven Einblick in das vielfältige Schaffen sowie in das Leben und Denken von David Vostell.

Este libro recopila treinta años de trabajo artístico de David Vostell en distintas disciplinas de la creación. Su polifacética obra abarca desde fotografías, dibujos, vídeos musicales, cortometraje y largometraje, collages fotográficos digitales hasta composiciones musicales más recientes. La obra de David Vostell es una búsqueda por el entendimiento de la existencia que desea y requiere una inmersión total...
© nivel 88



ISBN 978-84-612-2941-3



Film | Video | Music

The World of David Vostell 1976 - 2016
 typ3zivilisation.blogspot.com

You can listen to David Vostell music online:
reverbnation.com/davidvostell/songs
soundcloud.com/davidvostell
                                                                                                 Enjoy...


                                   
                              






36574 Bilder | 1979





  
Influences | 2007 | digital photomontges | digitale Fotocollagen | collages fotográficos digitales






                                                                            
                                                                                 The Being from Earth




                                                          Ginger Hel                


 The Being from Earth




Das filmische Werk von David Vostell ist von einer konsequenten Alogik gezeichnet.
Gegen alle Regeln des Films und der Video-Clips stemmt sich seine Arbeitsweise vehement. Makellose Ästhetik und Perfektion im Kino oder auf dem Bildschirm zu kreieren, ist nie seine Intention. David Vostell scheint keine Gesetze der Filmkunst oder der konventionellen Erzählstruktur kennen zu wollen.
Schon 1982 mit dem Kurzfilm Ginger Hel zeigt sich, das er in keine Schublade reinpassen will. Rätselhafte Spielszenen mischen sich mit Sequenzen die eigentlich Musik- Videos sind. In seinen Musik-Videos Homo Sapiens von 1985 oder Blood and Cokee von 1987, bei denen er Musik von Din A Testbild mit seinen bizarren, extrem verwackelten und sich penetrant wiederholenden Szenen kreuzt, hat er sich von allen Regeln des Filmhandwerks gelöst. 

David Vostells The Being from Earth von 1990 ist ein Spielfilm von einzigartiger Individualität. Ein paar Schauspieler und ein Wesen, eine Mischung aus Tier und Pflanze, geboren aus der Erde. Skurrile Dialoge, rätselhafte Handlung und eine undurchsichtige Geschichte machen David Vostell zum Aussenseiter des Films, und das gerade zeichnet ihn aus. Als wenn einer alle Gebote der Erzählweise brechen müsse um uns Betrachter nicht nur unterhalten zu wollen sondern uns zu zeigen das auch der Film frei von Regeln sein muss um uns neue Sehweisen anbieten zu können.  Tobias Berger, 2010 

 Con extrañas e inexplicables escenas y con lo inclasificable, las peliculas de David Vostell se internan en la incertidumbre. Angelique Mill, 2011

David Vostell kombiniert unterschiedlichste musikalische Stile und zitiert alte Meister in seinen eigenwilligen Kompositionen.  Nicki Deege, 2013 
In the 1970s a Super 8 camera was a real cool gadget. We use to combine our creative juices and whenever inspiration urges us, the time of despair is over. So we take a deep breath - LSD in Wonderland, and by all humble means - video has to be dirty! David Vostell is member of the odd an uncommon and we appreciate the beauty and uniqueness of his video style. T.C. , 2012

En los filmes de David Vostell como Ginger Hel de 1982 o El ser de la Tierra de 1990 encontramos la presencia de lo monstruoso, solamente aceptado por seres que conservan un cierto desvalimiento, una inocencia como la sentida por la niña ante la Criatura del Doctor Frankestein; el extraterrestre, el monstruo, nos devuelven las imágenes de nuestro propio inconsciente; el artista actúa como chamán, adopta el punto de vista de la inocencia para enfrentarse a las pesadillas de un mundo feliz. En las obras más recientes, el recorrido por toda la parafernalia de la modernidad le lleva a recuperar a viejos maestros, enfrentándose mediante la tecnología de los bits sin peso a ese sentimiento de aflicción ante la historia. Frente al Siglo de las Luces, donde el marco supone la vigencia de la representación y de un orden que estaba en la propia naturaleza; frente a un siglo XIX que cree encontrar en lo invisible, en la terrible selección natural, el núcleo de la explicación de la propia vida, las vanguardias y los movimientos artísticos del siglo XX se cargan de nihilismo, a veces dramático.

 Las fórmulas matemáticas entreveradas en las creaciones de David Vostell nos hablan del carácter sagrado de los números, no de su absoluta verdad: se convierten en un signo más de nuestra incapacidad para entender el mundo. David Vostell tampoco quiere o debe entenderlo, más bien toda obra es una transfiguración, un fogonazo en la negrura del no-ser. Rogelio Pérez Mariño, 2009

Los extravagantes videos musicales y películas de David Vostell son alucinógenos viajes en el interminable túnel imaginativo con toda la complejidad de las criaturas en una atmósfera extremadamente fantástica creada in extremis. Sandra Marie, 2013 
 
Fue por 1983 cuando recibí un envío tuyo desde Berlín. Una promoción de tu cortometraje Ginger Hel, con una pegatina que me resultó modernísima entonces y ahora, y que conservo con cariño después de tanto tiempo. Me sumergí en un mundo extraño, una sucesión de bellísimos fotogramas de un sintético minimalismo realmente cautivador. Ginger Hel, una historia de amor. Secuencias como en un vídeo musical incrustados en la narración como en la zarzuela española o el Bollywood. Un mundo extraño, una diosa de la mitología y vampiros invadidos por el hedor y la putrefacción de la muerte conviviendo por igual con la sublime belleza. Un triángulo amoroso con personajes tatuados expresando exteriormente las internas heridas del alma en una estética gótica pionera de tiempos venideros con retazos clásicos y expresionistas del cine mudo de Murnau y Lang.

Todo lo tuyo David Vostell, es una mezcla vanguardista. Otro estreno que nunca olvidaré fue en el 1985 de dos vídeos musicales tuyos. Homo Sapiens y Lost in Life, que realizastes con la entonces nueva tecnología VHS más económica que el celuloide. Después de ver esos vídeos tuyos en mi casa había que enseñarlos a la Movida Madrileña. Su estreno lo tuvieron en la discoteca Friends en Puerta de Toledo, sitio puntero en el ambiente madrileño, en unos 30 monitores amontonados en el fondo de la barra. También distribuimos esos vídeos tuyos en Archy, Voltereta y Ras donde los vimos muchas veces en las noches de copas en los monitores como un icono de modernidad. Homo Sapiens, donde encontramos una forma trepidante de narración del retrato verdadero del hombre como testimonio de costumbres y quehaceres del momento en una repetición de imágenes muriendo distorsionadas con interferencias y cortes provocados como en la vida misma hasta el colapso final.


                      Homo Sapiens | 1985
Una fotografía en negativo trastocando la percepción con los colores vivos e intensos transgrediendo los habituales cánones cinematográficos con la vanguardia musical electrónica de Mark Eins. Realmente impactante. Lost In Life nos sumerge en una valiente reflexión, tocando tabúes presentes en un cócktel de ingredientes fuertes. Guerras reales y ficticias filmadas del propio televisor, el visor del mundo. Hard-Core, sexo sádico, látex, provocación. Todo bajo una música con un matiz clásico como fondo acústico y usando la cámara como pincel en un retrato provocador del hombre y la realidad. Todo es extraño sin control ni estética habitual.

Tus vídeos musicales de aquel momento son una antiestética que nos lleva a tomas desenfocadas, planos repetidos, secuencias movidas sin control, planos tomados al libre albedrío; en realidad aquéllo era un manifiesto contra el buen hacer del cine, contra todas las normas, contra todo lo establecido. Un fascinante experimento esos vídeos. Desde que se puede ver de nuevo toda esa trayectoria tuya en vimeo, pongo tus vídeos y películas de fondo musical en mi casa y me remonto a tiempos anteriores y me abordan recuerdos de tantos años de amistad. He recordado y he descubierto de nuevo lo que me has dado en mi vida y el granito de arena que has aportado a la Movida Madrileña. Joaquín Aguilera, 2009


Mark Eins | David Vostell | shooting | Dreharbeiten | rodaje | Ginger Hel | Berlin | Kreuzberg | 1982









EEM | 2008 | digital photomontages | digitale Fotocollagen | collages fotográficos digitales











  



               David Vostell | 1985



                                                                                      Blood and Cokee | 1987









 G=L+Txu,o111o1ooxX=G Nacimiento / Geburt FxXxTxo,oo152522111=F1 Familia / Familie L=L1xLxT=x=L Amor / Liebe Z=Txo,00101+C1x(W)x100.63663xT Lo que el futuro depara / Was die Zukunft mit sich bringen wird B=Z+R (0,08)xL Conciencia / Bewusstsein G=T+I+L+Zx(X)x=o,o1o1o1112 Pensamientos / Gedanken G=X.m2xT=G Paciencia / Geduld G=TxA+I+G+G2xo,10888888+G3(88) Oro / Gold I11=M+Z+Exo,oo1o116336
 luminados / Illuminati S>T=W+Mx2xSxL+(T) Belleza / Schönheit I=T+F+Lx0,0782x1+F Imaginación / Imagination I=T+Lx(W)=R+Sxo,314x23 Inspiración / Inspiration P=T+E+Lx188,0208 Psicologia / Psychologie T2+S+L+T=0,001020102002/ x (X2-T1) Sueño / Traum Z=T/ T=B+LxUx(1,001888)=U=Z Tiempo / Zeit TO=G+F+L+TxUn Muerte / Tod S=T+(U)xL Alma / Seele

 Formulas of Life | Formeln des Lebens | Fórmulas de la Vida | 2005







never do something that can catch up to you, never do something that you later regret




The Universe is Music | 2006 | digital photomontages | digitale Fotocollagen | collages fotográficos digitales










Words on paper | Worte auf Papier | Palabras sobre papel | 1984



  

Sketch Book 1995 - 1998 | 1998


   
       so many days filled with pain,  I must maintain






Voyage - human body | 2009 | digital photomontages | digitale Fotocollagen | collages fotográficos digitales
















heaven knows I pray


Tom hatte sich hingegeben und sich in sie verliebt. Er wusste, dass es kein gutes Ende nehmen würde. Ihre Kraft ging auf ihn über und er wollte sich nicht dagegen wehren. Es machte ihn auch immer neugieriger zu erfahren, was ihm ihre so kalte Liebe zeigen würde. Sie konnte seine Gedanken so klar lesen, als würde er sich ihr, mit allem Mut, anvertrauen. Nicht das, was sie über ihn wusste mochte sie an ihm, sondern das wozu er fähig war für sie zu tun.

An Mark hatte sie lange nicht mehr denken können und bei aller Bewunderung, die sie für ihn aufbrachte, hatte sie nie in seine Welt eingreifen können. Die Sandhügel mitten in der Stadt, zu denen er sich eines Nachts verschlagen hatte, alleine mit seinen wirren Wortschlachten, hatten ihm den Rest gegeben, um sich von dieser Welt so herrlich zu verabschieden. Dieser Turm, mit Gas bis unter den Rand gefüllt, der ihn schon so lange reizte, sollte für ihn sein letzter Ort sein.

Er war an einen Tag im Winter schon einmal da gewesen, um ihn sich näher anzusehen. Dieser Gasbehälter hatte für ihn etwas von einer Kathedrale. Er hatte beschlossen, ihn bei Nacht zu besteigen. Hel, die diesen Moment fühlte, riss sich aus Toms Armen und rannte zu dem Gasbehälter. Sie kam zu spät, er lag tot auf den kalten Steinen in der Nacht. Sie weinte um ihn und spürte zum ersten mal die Wärme ihrer Venen. Alles, was geschehen war, hatte sie bis jetzt nur aus der Ferne fühlen können. Sie hatte alles für ein Spiel gehalten, nun war sie ein Teil davon geworden. Seile sind von Gelenk zu Gelenk kreuz und quer durch die ganze Stadt gezogen.



 Ein Dickicht aus Seilen, Schnüren, Ketten und Fäden, in denen wir uns verstricken. Fäden reissen eher als Seile und diese schneller als Ketten, verschieden stark sind diese Bindungen. Sie musste jetzt so oft an die Dinge denken, die Mark ihr gesagt hatte. Sie waren so unverständlich für sie gewesen, wie Speisen durch die Flinte in den Magen. Sie sah jetzt alles viel klarer, die Löcher in ihrem Magen waren wie weggeschossen. Ein Schuss, den selten einer hört, ein Hund, der nicht bellen kann.

Leber aus Kupfer, Herz aus Eisen, Nieren aus Glas, Brust aus Nickel, Keule aus Silber, Hirn aus Gold und Rücken aus Plastik. Das ist ein herrlicher Braten. Für sie war Hochbetrieb der Sinne, Augen und Ohren purzeln wild umher. Zerfetzte Leiber, weinende Kinder, der Griff zum Brotmesser.

Unser Unterbewusstsein ist ein Sekundenhorrorfilm.
Arme und Beine umschlingen uns, Blicke besudeln uns, Haare schneiden wir aus lauter Angst, sie auf Rolltreppen zu verlieren. Langweilige Fernsehspiele auf fünf Kanälen tanzen uns auf der Haut, Lichter glühen um uns heisser noch als unsere Glieder. Klebstoff klebt uns nicht zusammen, nicht heute, doch schon morgen. So kreisten ihre Gedanken in ihrem Kopf, sie konnte sie nicht bremsen.

Ginger Hel | 1982



Aus einzelnen Linien, manchmal aus wenigen Punkten nur entspinnen sich die bizarren Wesen in den Zeichnungen von David Vostell - mal solitär, mal sich verdoppelnd, vervielfachend oder gespalten, mal sich zu skurrilen Geschichten verdichtend. Dann wiederum tritt uns eine Fülle von Strukturen und Patterns entgegen, die wie eine Übersetzung der Jugendstil-Ornamentik in die Gegenwart anmuten. Das Sketch Book 95 96 spannt diesen Bogen von den feinen, sparsamen Linien in den Frauenakten und Porträtskizzen bis zu den Sketches, deren Wesen mit ihren opulenten Zeichen dem Hier und Jetzt vollkommen entrückt erscheinen. Horrorvision odar Utopia? Alptraum oder natürliche Evolutionsstufe des Homo Digitalis in einigen tausend Jahren - oder ein wenig später? Visionen und Assoziationen aus dem Science-Fiction-Genre tun sich auf. Androiden, Catpeople, Maschinen-Menschen und Mensch-Maschinen bevölkern diese Welt; androgyne Gestalten, die bereits den Regisseur David Vostell beschäftigten. In den Zeichnungen entfalten sie ein Eigenleben, das unter einer kryptischen Oberfläche - die von der Ästhetik der Grafities und Tags geprägt ist - variationsreich durchscheint.

Ihre Konturen muten an wie Tatoos, die sich in die Haut eingraben, vielleicht schon zu Haut geworden sind; sie brechen tentakelartig auf, zeigen Lust und Schmerz, Sinnlichkeit, Wut und menschliche Deformationen. David Vostell verknüpft archaische Themen mit Zeichen und Sozialisationssymbolen der 1990er Jahre: aus Maschinen wachsen Geburt und Tod, Eros und Thanatos begegnen Computern, kämpfen in skurrilen Gestalten und Formen mit - oder gegeneinander. So projizieren diese Skizzen die ewigen Beweggründe der Menschheit nicht nur in unsere Gegenwart, sondern weit darüber hinaus in eine ferne Zukunft. Visionen einer futuristischen Welt, deren Erscheunungsformen gänzlich fremdartig sind und deren menschlicher Phänotyp uns heutzutage noch unvorstellbar anmutet. Die Themen, die Vostells Figuren bewegen, sind uralt und gegenwärtig zugleich und bleiben auch in ferner Zukunft den unsrigen beruhigend ähnlich. Die einzelnen Figuren eröffnen sehr eigenwillig die gesamte Palette menschlichen Seins - changierend zwischen Bewusstsein und Unterbewusstem - zwischen erotisch lustvollen und aggressiven Momenten. Die Sehnsucht nach Ruhe und Schutz - selbst in den Phantasien und der Phantasiewelt - zeichnet sich in denjenigen Skizzen ab, wo Körper oder auch Köpfe, wo Sinnlichkeit und Geist, männliche und weibliche Natur miteinander verschmelzen, symbiotische Träume in Zwitter - und Fabelwesen sich glücklich verdichten. Eine zentrale Rolle in den Skizzen spielt die Sexualität: der Urtrieb menschlichen Seins in all seinen Wesensausprägungen; in seiner lebendigen, verbindenden Kraft wie in seinem zerstörerischen Potential und andererseits in der Selbstzerstörung des Menschen durch den Menschen.

Erotische Phantasien und Geschichten von poetischer Kraft und Zartheit stehen neben Szene krasser Geilheit oder sodomistischen Phantasien bis hin zu vielschichtigen Formen der Gewalt. Vermeintliche Freiheiten und die grenzenlosen Möglichkeiten moderner Technologien beeinflussen nicht nur unser Denken, den Geist und die menschliche Interaktion. In dem Bild eines Computers, aus dessen Monitor eine menschliche Wirbelsäule ragt, liegt nicht nur das Rückgrat bedrohlich offen; wenn wir uns das Ende der Wirbelsäule als Sitz und Zentrum von Sexualtität und Fortpflanzung denken, so symbolisiert die Maschine die Verkümmerung gerade dieser menschlichen Lebensenergien. Der Kopf dieses Wesens existiert nur noch rudimentär, verborgen unter einer Hasskappe. In amorphen, technoiden Männerträumen scheint sich die Sinnlichkeit jedoch langsam zu verlieren. Obschon das Weibliche, der Sexus direkt ins Zentrum des männlichen Hirns zielt, scheint das Reale, die Frau, Freundin oder Geliebte, im Kampf gegen die Maschine zu unterliegen. Doch der Ausblick des Mannes verspricht nicht einmal Verheissung; sein Blick schweift knapp am Computer vorbei in eine unendliche Leere und strahlt profunde Langeweile und Einsamkeit aus. In anderen Zeichnungen hat er ihr nur noch den Rücken zugewandt.

Mit einer Leine ist er an den Fernseher gefesselt, wie über eine Nabelschnur mit ihm verbunden. Während der Mann den Teufel mit dem Belzebub austreibt, mit der gezogenen Fernbedienung gegen die Pistole des Computerwesens zielt, wendet sich die Frau resigniert ab. Selbst da, wo sie sich in ihrer Blösse und mit ihren Reizen selbstbewusst vor den Computer setzt, den direkten Zugang sozusagen versperrt, scheinen die Waffen einer Frau nicht mehr zu funktionieren. Sie bleibt für sich und Lysistrata gleich greift sie zum letzten Mittel: der totalen Verweigerung durch Liebesstreik. Durch einen verschlossenen, gläsernen Schrank blickt sie lachend hinaus, den Schlüssel hält sie triumphierend in der Hand. Ob der Könifssohn kommt und Schneewittchen rettet oder ob Lysistrata von der männlichen Macht überwältigt wird oder gar ignoriert, bleibt offen. Die Figuren verraten uns weder eine Antwort noch eine Lösung und ihr Schöpfer auch nicht. Obschon sich David Vostell in vielen Skizzen der Ikonografie des Comics bedient, verzichtet er auf den direkten Kommentar via Sprech - oder Gedankenblasen. Der Text und die Geschichten enstehen im Kopf des Betrachters und in seiner Phantasie.

Einige der Bilder stehen aber auch ganz für sich und entfalten in ihrer Eigenständigkeit eine klare Symbolik: Bewegungsstudien eines Schmetterlingstanzes im Zustand der Verpuppung oder sie Übermutter, das Urweib - Hexe, Hure und Heilige zugleich, die an ihren Rockzipfeln Männer wie Marionetten tanzen lässt. Ebenso die mächtige Hand - die Hand Gottes vielleicht - die den Menschen, dessen Körper sich wieder aus einer Maschine windet, um sich kreisen, drehen und schwindeln lässt, um ihm in seinem Grössenwahn Einhalt zu gebieten, wenn er, wie in der vorangehenden Zeichnung, sich die Erde nicht nur Untertan macht, sondern sie in seiner alles umschlingenden Gier langsam erdrückt. Oder hält Swifts grosser, täppischer Riese Gulliver die geliebte Mutter Erde schützend in seinen Armen, gegen die Übermacht des Rationalismus und für den Sieg der Phantasie?

 Michaela Nolte | Sketch Book 1995 - 1996 | 1996







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Mark Eins | David Vostell | 1985